22 de octubre de 2021
ASOCIACIÓN LATINO AMERICANA DE DERECHO AERONÁUTICO Y ESPACIAL ALADA – CARTA DEL PRESIDENTE
Buenos Aires, 21 de octubre de 2021.-
Profundamente conmovido por la desaparición física de nuestra Secretaria General, la Dra. Marina Donato, envío esta Carta a todos nuestros Miembros, no solo para transmitir tan infausta noticia, sino para evocar dolorosamente la enorme personalidad de quien llevara nuestra Secretaría General por los últimos cuarenta y cuatro años.
Marina falleció el pasado 18 del corriente a los 85 años de edad, como consecuencia de una cirugía motivada por una antigua enfermedad, en la plenitud de sus facultades mentales. No solo fue una excelente funcionaria de nuestra entidad, sino para todos los de mi familia una amiga ubicada en la línea vertebral de nuestros principales afectos. Por ello, en el plano personal es una pérdida muy sentida e insustituible.
Quienes tuvieron la posibilidad de tratar a Marina saben de su inalterable honestidad intelectual y gran capacidad para el tratamiento de todas las cuestiones que se relacionan con nuestra materia. Fue una gran jurista y una funcionaria a la que mucho le debe la República Argentina por su probidad y capacidad ejecutiva, no solo en la antigua Dirección Nacional de Aviación Civil, sino como Secretaria de la Comisión Latinoamericana de Aviación Civil primero y luego como Directora de Transporte Aéreo de la Organización de Aviación Civil Internacional. Su último paso por la función pública tuvo lugar como Subsecretaria de Transporte Aéreo de la Argentina, a fines del pasado siglo y comienzos del actual.
No es éste el lugar para desarrollar una lista de su historia de vida profesional. Todos la conocemos muy bien, pero también sabemos que para ALADA, el lugar que Marina ocupó por su personalidad y la gestión que realizó, serán difíciles de reemplazar. Nadie puede saberlo mejor que este Presidente, para quien fue una colaboradora excepcional.
No hay palabras para expresar los sentimientos en algunas situaciones ante las que nos enfrenta la vida, como es en este caso. Por ello, quede aquí expuesto todo el dolor que la partida de Marina para su gran viaje final suponen para mí y para mi familia, así como para toda la comunidad aeronáutica que la conoció y supo aprehender sus valores morales, profesionales y académicos.
Ruego oraciones por su memoria y que descanse en paz.
Dr. MARIO O. FOLCHI
Presidente